Ciudad de México.- La Comisión Especial de Seguimiento a la construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, que preside el diputado Rafael Hernández Soriano (PRD), llevó a cabo la primera mesa de trabajo con el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), para conocer el avance físico de la futura terminal.
Se destacó que para diciembre de 2018 se prevé estén concluidas las pistas 2 y 3.
El legislador señaló que es necesario conocer la integración del financiamiento de la obra, en qué situación se encuentran los fideicomisos, los montos acordados inicialmente y el flujo actual, que “este año rebasa los 28 mil millones de pesos”.
La diputada María De La Paz Quiñones Cornejo (PRI), secretaria de la Comisión, destacó la importancia de contar con información puntual y por escrito sobre la construcción, por lo que solicitó se haga llegar a todos los integrantes de la Comisión para elaborar un mejor análisis.
El diputado Jesús Emiliano Álvarez López (Morena) pidió conocer si se han solventado las observaciones de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) respecto a 250 millones de pesos en el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM).
Al hacer uso de la palabra, el director general del GACM, Federico Patiño Márquez, manifestó su disposición a proporcionar toda la información respecto del proyecto. “Hay dudas e inquietudes y trataremos de responderlas. Queremos llevar a buen puerto el proyecto de la mejor manera”.
Se trata de uno de los aeropuertos más grandes y modernos del mundo, amigable con el medio ambiente, cuyo diseño y tecnología permitirán reducir el consumo de agua, y “además cambia la forma de hacer obra en el país”.
Aseguró que se impacta positivamente en el desarrollo del oriente de la zona metropolitana de la Ciudad de México, pues impulsará obras sociales que aumentarán su conectividad.
Destacó la importancia de contar con un aeropuerto como el NAICM, éste, y dijo que al finalizar la administración estará contratada y licitada, cerca de 90 por ciento de toda la obra.
“Hay 230 empresas contratistas y subcontratistas trabajando en la zona todos los días; entran y salen más de 6 mil camiones de material; hay 29 proyectos en ejecución; se generan cerca de 40 mil empleos directos e indirectos, y se pretende que el año que entra, cuando se incremente el volumen de obra, se rebasen los 100 mil empleos en los municipios de Ecatepec, Nezahualcóyotl, Chimalhuacán, Texcoco y Atenco, donde vive 25 por ciento de la población mexiquense”.
Sostuvo que a diciembre próximo se habrán ejercido cerca de 30 mil millones de pesos, “vamos de acuerdo al programa”. No obstante, reconoció que ha habido retrasos, pero se han tomado medidas correctivas para recuperar el tiempo.
Aseguró que “la fecha que tenemos es octubre de 2020 y estamos trabajando todos los días para cumplir, Son proyectos muy complejos”.
Acerca de las observaciones de la ASF sobre los 250 millones de pesos, dijo que aproximadamente 80 o 90 se referían a la construcción de la barda perimetral, lo cual quedó completamente subsanado con la documentación respectiva.
Además, cerca de 150 millones se referían a un contrato, por el que aparentemente se hacía un doble pago, pero “no fue el caso, porque una cosa es el contrato con el arquitecto para diseñar la Terminal y la Torre de Control, y otra es el contrato de acompañamiento a la constructora durante el proceso. Son dos contratos distintos, y esa situación se ha aclarado”.
El director corporativo de Infraestructura del GACM, Raúl González Apaolaza, explicó que a septiembre de 2018 habrá algunas obras concluidas, e incluso a la fecha se tienen unas terminadas, como la barda perimetral de 31 Km de longitud, 4.5 metros de altura y 40 centímetros de espesor.
Además, para consolidar el terreno, se ha hincado el total de los pilotes de la Torre de Control (294), del Centro de Transporte (mil 50) y del Edificio Terminal (cinco mil 650).
La construcción de la Torre de Control de 90 metros de altura –que consta de dos estructuras: el Edificio Base de Soporte y la Torre de Control— será de 83 por ciento y para diciembre de 2018 estaría terminada.
El Edificio Terminal constará de 743 mil metros cuadrados de construcción distribuidos en 4 niveles, llevará un avance de 25 por ciento. La Pista 2 tendrá una evolución de 86 por ciento, y la Pista 3, de 74 por ciento, pero ambas estarán terminadas en diciembre de 2018. La Pista 6 llevará un avance de 35 por ciento y el sistema eléctrico de la terminal tendrá un progreso de 81 por ciento.
Al hablar del financiamiento del NAICM, el director corporativo de Finanzas del GACM, Ricardo Dueñas Espriu, detalló que por parte del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), se le asignaron 15 mil 819 millones de pesos; y de créditos bancarios y bonos se destinaron 46 mil 170 millones de pesos, lo que suman 61 mil 989 millones de pesos de recursos.
De esta cantidad, agregó, se han invertido para obra y servicios relacionados, 27 mil 998 millones de pesos, y al corte de septiembre pasado se cuenta con un patrimonio de 33 mil 991 millones de pesos. “Es muy importante que tengamos este dinero dentro del patrimonio porque son recursos que se necesitan para tener suficiencia presupuestal que permita licitar la obra”.
Sostuvo que “el nuevo aeropuerto es autofinanciable, genera su propia fuente de pago, tiene una estructura mixta de recursos, parte proviene del gobierno federal, inversionistas y de los mismos usuarios del aeropuerto”, indicó.
Explicó que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México obtiene recursos de ingresos comerciales, aeronáuticos y a través de la Tarifa de Uso del Aeropuerto (TUA). Dicha tarifa la pagan todos los pasajeros que despegan de la terminal aérea y está diseñada para modernizar y expandir los aeropuertos a nivel mundial.
“Aproximadamente, 40 por ciento de los pasajeros que despegan de la Ciudad de México son los que pagan la TUA”, está determinada en dólares y se ajusta cada año por la inflación en moneda estadounidense.
El esquema financiero se contempló en dos etapas; en la primera, se creó una línea de crédito revolvente por tres mil millones de dólares, “un crédito con 13 bancos mexicanos, españoles y de la banca internacional, por cinco años”. En la segunda, se ingresó al mercado de capitales y se emiten bonos de largo plazo, afirmó.