La visión de futuro, hacia donde se dirige la economía y lograr su objetivo
Mario Sandoval Chávez
Ya estamos en la última semana de mayo, los indicadores macroeconómicos confirman estabilidad en el tipo de cambio fix a razón de 19.86, los cetes a 6.93% a 28 días anual, la inflación en 7.68 y jalando a la UDI a 7.32 y unas sólidas reservas son del orden de los 198 mil millones de dólares. La inflación es un obstáculo global, se ha convertido en un añadido a las dificultades propias de las economías de los países para gestionar la crisis que generó la pandemia y que aun muestra efectos en China que hay que tener en cuenta.
Las dudas, insinuaciones, declaraciones críticas de grupos de análisis privados locales y extranjeros, que consideran que el PIB no crecerá más allá del 2%, sin embargo, para las autoridades financieras consideran que será superior al 3%.
Hay sectores que se están impulsando al alza, el sector servicios, la manufactura y la construcción. La alta dependencia de la actividad económica de USA nos afecta o beneficia según la situación, ellos tienen una inflación mayor que ha preocupado en serio a sus economistas y autoridades. Por lo que México está obligado a fortalecer e impulsar su mercado interno y abrir mercados que gradualmente nos den equilibrio.
El reciente pacto anti inflacionario está en su etapa de inicio y los efectos y resultados se verán en un par de meses, es probable que se logre una contención y si bien siga siendo un tema de discusión de que si es un programa neoliberal o que si es un esquema inédito de atención social y económica. Lo importante es que funcione para el bien de todos. Ya si los de afuera o sus disque expertos le siguen apostando al fracaso, les va a pasar como sucedió con el tipo de cambio al inicio del sexenio y resulto que hay estabilidad y de ello no les queda más que hacer mutis.
En la crisis de los 90s, las reservas estuvieron en niveles de 15 mil millones de dólares (hoy son 15 veces más que ello y por eso da soporte al equilibrio al tipo de cambio), en aquella época con un endeudamiento privado y público que generó desequilibrio, el fondeo en cetes y tesobonos, puso a nuestro país en la tormenta perfecta. Se fomentó la especulación cambiaria y las tasas de intereses se dispararon haciendo impagables las deudas. Al final los ciudadanos pagaron y siguen pagando los platos rotos de una crisis financiera en la que no tienen que ver y que sirvió para rescatar a un grupo privilegiado, a través de impuestos, bajos salarios y desempleo que se convirtió en economía informal.
Después de esa catástrofe, hay que erradicar el “Riesgo o Reputación Moral» de financieros e inversores, consistentes en dar crédito o especulando en el tipo de cambio, sabiendo que su irresponsabilidad la acabarán pagando otros. La consecuencia del desajuste fiscal de las autoridades responsables en pasadas administraciones, de la rigidez de sus mercados y de la falta de competitividad, fue el endeudamiento continuado que ahora ha sido en estos tres años y medio limitado al mínimo. Sin embargo, la inversión improductiva pudo ser financiada en los últimos tres sexenios por las conductas de riesgo y reputación moral que dejó un paisaje lleno de deudas en el sector hipotecario público y privado, inmuebles no utilizados o sin rentar y de desempleo simulado con la altísima economía informal.
El sector financiero cambiará su participación de negocios y su orientación a sectores productivos no solo al consumo e hipotecario. La venta de Banamex en este año es la oportunidad de que capital nacional recupere participación en la Banca que opera en México, que bueno que hay extranjeros, pero es mejor que los mexicanos recuperen su posición en el mercado financiero en beneficio del país. Recientemente se informa por CNBV que dio el visto bueno para 30 Fintech, sin embargo, su participación es más publicitaria que real en la participación de negocios financieros de alto impacto.
La venta de Banamex generara impuestos relevantes, la operación es del orden de los 10 mil millones de dólares, toda vez que la venta se refiere a la parte de menudeo y comercial y que su participación de mercado fue a la baja con la administración de Citi. Si bien los grandes bancos no tienen un riesgo crediticio hasta hoy elevado, tampoco se puede decir que el sector en su conjunto goza de buena salud, más allá de los 10 bancos más grandes, hay 40 que nos son grandes competidores a excepción de nichos de negocios en la participación de mercado. Ya se parecen a la Liga mx, cuatro o seis máximos aspiran al título y los demás pues ahí apareciendo en la foto.
El crédito no fluye al sector productivo (agronegocios y Pymes), queda poco tiempo en materia de detonar crédito productivo a este gobierno, si este país quiere crecer cada año a niveles superiores del 4% del PIB anual de manera sostenida cuando menos, debe reactivar su mercado interno y para ello necesita que la Banca de Desarrollo y el sector financiero privado de capital nacional sean detonadores activos y ahí el Presidente López Obrador debe hacer más labor con las autoridades financieras, de economía y gobernación, para que haya un pacto financiero interno de crecimiento.
El Presidente López Obrador, tiene un reto importante con la situación económica, el decrecimiento con la pandemia, el entorno global se ha complicado con asuntos bélicos que afectan la proveeduría y la cadena de suministros e insumos clave para la industria y la alimentación. Pero ha atendido temas socioeconómicos de los grupos más vulnerables y eso le ha dado apoyo y estabilidad, pero es hora de que su equipo le apoye con ideas y propuestas sensatas y logrables en materia económica, fiscal y financiera para aprovechar los tratados comerciales de exportación y fortalecer el consumo interno con productos nacionales.
Estamos prácticamente a dos años de que concluya esta administración, las condiciones críticas y sensacionalistas, son parte de la opinión pública. Los resultados macroeconómicos, dan estabilidad y nos hace reflexionar a volver al camino de lo básico, no endeudamiento excesivo, canalizar recursos a temas productivos no especulativos, desarrollar el crecimiento orgánico regional, fortalecer el estado de derecho con mejores tiempos procesales y tener una sana competitividad en el sector público y el sector privado.
CEO FISAN SOFOM ENR
Banquero a nivel Directivo con más de 30 años de experiencia de negocios.
Ex Presidente Nacional AMFE
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@MarioSanFisan