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Historias de negocios y sus efectos al sector financiero

Mario Sandoval Chávez

Esta semana Crédito Real informó que una autoridad judicial declaró su disolución, por lo que se procederá a su liquidación. Lo relevante del tema es que es una SOFOM informó a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) de su quiebra.

Los principales accionistas son la familia Berrondo, fundadores y controladores de Grupo MABE, que es el fabricante líder de línea blanca en México y varios otros países en el continente. En los 90s fueron accionistas junto con la familia del Valle de BITAL, el cual hoy es controlado por HSBC.

Los Berrondo llegaron de España a México en la década de los 20s, MABE fue fundada en la década de los 40s, por lo que la finalización de la segunda guerra mundial y la reactivación económica de esa época los hizo pasar de importadores a fabricantes, siendo inicialmente proveedores de equipos de iluminación para diversas dependencias que les dio flujo y con ello el salto a línea blanca.

Su crecimiento le permitió adquirir IEM al Grupo Saltillo, también probaron en otros negocios, para los sesenteros y setenteros en sus memorias recordarán que fueron los propietarios de EXIN, que tenía las autopistas y carritos eléctricos, hoy tan de moda conceptual para algunos grupos de la sociedad. Los famosos Excalectric.

De igual manera entraron a la fabricación de muebles de madera e incluso controlaron laboratorios médicos. Tuvieron una época de grandes logros empresariales por el cierre de importaciones y si bien había un mercado protegido para los industriales, tuvieron la capacidad de ser un grupo dominante.

Esto les llevo a participar en el sector financiero, fueron fundadores junto con los del Valle de BANCRESER, con la nacionalización bancaria del ex presidente López Portillo la perdieron y formaron posteriormente Grupo Prime y unos años más tarde en la privatización del ex presidente Salinas de Gortari compraron Banco Internacional al que luego renombrarían BITAL.

Si bien exitosos en el sector electrodomésticos, en el sector financiero ha sido lo contrario, les gusta y participan en las ligas mayores, no hay duda que sus redes de contactos y líneas de fondeo son relevantes, como impresionante es que hoy una cartera en problemas del orden de los 55 mil millones de pesos la ha llevado a la quiebra. Esto sin duda tendrá efectos colaterales en Grupo Mabe y la familia Berrondo. Su exposición a riesgo principalmente por micro créditos y créditos empresariales de difícil recuperación los tiene contra la pared.

Las autoridades financieras dicen que no hay riesgo sistémico, igual lo han dicho de Banco Famsa, de Accendo Banco y antes con FICREA o Coincidir. Lo que es un hecho es que hay riesgo reputacional, en el sector financiero si cuenta y mucho, no se puede negar que tiene efectos negativos para el sector financiero privado, en materia de fondeo y precio, lo cual se traduce en menor oferta y más costos para los clientes cautivos y potenciales.

La sobre oferta de crédito de nómina con laxitud en montos y crédito por encima de la capacidad de pago, así como la promoción abierta de créditos empresariales sin adecuados filtros, llevó a una exposición de riesgo anormal a la compañía, su tamaño de activos es mayor a la media de los 50 bancos que operan en México, por lo que en mi opinión la CNBV y SHCP deben tomar este tema muy en serio y actuar, pues que sucede con otras entidades no bancarias de menor tamaño pero que han orientado sus esfuerzos de negocios en mercados idénticos.

México es la 15ª economía global, sin embargo somos el único país de esas 15 economías más importantes, en donde su sistema financiero es mayoritariamente de capital extranjero en la administración de los activos financieros. Estos fracasos del sector financiero nacional sí impactan en credibilidad y en la inversión. La próxima venta de Banamex tiene varios pretendientes de gran calibre, para los nacionalistas en los que me incluyo, es necesario que Banamex vuelva a ser de capital nacional, pero para hacer las cosas bien como lo hizo la familia Legorreta por cerca de 100 años. El Banco líder en crédito empresarial, hipotecas, en captación y diversos negocios financieros. Una época en qué marcaba la pauta, hoy es una lástima ver que dejó ese liderazgo en el sector, diversas contingencias y que sus servicios dejan mucho que desear, han cambiado la percepción de la clientela. Lo cual tendrá impacto directo en su precio de venta.

De acuerdo a datos de la CNBV proporcionados por las propios bancos, los activos totales al cierre de 2021 son del orden de 12 billones de pesos, sin crecimiento con respecto a 2020, la cartera total se reportó por 5 billones 550 mil millones de pesos con un crecimiento del 5% con respecto al año anterior. El capital contable reporta 1 billón 310 mil millones de pesos con un crecimiento del 10% con respecto al año anterior. El resultado neto del sector fue de 182 mil millones de pesos con un crecimiento del 78% con respecto a 2020.

El retorno sobre capital (ROE) fue de 14.60%, siendo superior en un 65% al año anterior. El índice de morosidad del sector es por 2.05 % sobre su cartera total y un 160% de cobertura sobre su cartera morosa. Sin duda resultados en conjunto relevantes muy superiores a la economía mexicana, debería ser un reflejo similar y no lo es, lo cual significa que sus fuentes de ingresos compensan de manera sobresalientes sus portafolios de crédito malos. El cobro de comisiones por todo, el margen entre lo que prestan y pagan al ahorrado es abismal.

Nuestro PIB creció 5% en 2021, nada que ver con el crecimiento del sector bancario que superó la media del 25% anual, lo cual invita a la reflexión, es decir la economía mexicana crece poco y el sector bancario debería ser un reflejo en el comportamiento de la economía y eso no es así por las siguientes razones. Las políticas públicas no se han enfocado a generar un desarrollo y acompañamiento del sector MIPYMES, el cual se basa en tener financiamiento acotado en lo referente a factoraje y arrendamiento. Así mismo el crédito ha sido mayormente a grandes empresas y sector público, de igual manera el enfoque a créditos personales (preferentemente nóminas) e hipotecarios (nivel residencial), donde el riesgo es menor y la fuente de pago es más segura.

La deficiente y lenta resolución de los asuntos judiciales, procesalmente los asuntos llevan años y años en resolverse y ejecutarse, siendo uno de los principales lastres para dinamizar el crédito productivo y eso lo hace caro por la inseguridad judicial para recuperar el recurso. Tema que, a los tres poderes ejecutivo, legislativo y judicial, no les ha interesado de manera decidida resolver, lo cual es un lastre que seguirá siendo un factor negativo para el crecimiento y que forma parte de las deficiencias del estado de derecho. Dar crédito es bien fácil, lo difícil es cobrar y reintegrar ese flujo en multiplicar el direccionamiento de créditos productivos.

El sector financiero privado genera utilidades relevantes por ingresos que no tienen que ver con el crédito productivo, sino por el crédito al consumo y las comisiones por sus servicios. Dentro del propio sector bancario la concentración de negocios y resultados se identifica en 5 instituciones que detentan el 80% del negocio, el 20% se redistribuye en el resto de participantes, que han orientado su rentabilidad en ser complementarios o a posicionarse en el mercado de cambios, fiduciario o las finanzas populares.

Sin duda que la experiencia de Crédito Real, Famsa, Accendo debe poner atención en aquellos grupos con altos indicadores de morosidad y que reflejan que el negocio de bancos no dominantes si bien no es sistémico sí afecta en credibilidad de los demás participantes, la información financiera de entidades con activos mayores a 5 mil millones de pesos, deben tener mayor atención y seguimiento de sus cifras por parte de las autoridades financieras.