Ciudad de México.- El próximo gobierno de México enfrentará un “panorama fiscal difícil” con demandas sociales y necesidades energéticas para hacer rentable a Pemex y alcanzar las metas de transición energética, señaló Moody’s Ratings.
“Independientemente del resultado de las elecciones, prevemos que el próximo gobierno enfrentará una situación difícil debido al deterioro fiscal, las necesidades de recibir apoyo de Pemex y las promesas de campaña de aumentar el gasto social y la inversión pública”, consideró en un reporte la firma.
Señala además que el gobierno entrante se encontrará un déficit fiscal de más del 5% del PIB en 2024.
Además, el análisis advierte que Claudia Sheinbaum o Xóchitl Gálvez tendrán menos capital político que el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador, lo que “hará que los riesgos sociales y de gobierno adquieran mayor relevancia”, y complicará las capacidades de las candidatas para cumplir sus promesas de campaña.
Moody’s refiere que las probabilidades de ganar de Jorge Álvarez Máynez, candidato de Movimiento Ciudadano, son muy bajas.
Según datos de la plataforma Oraculus, que promedia los resultados de distintas encuestas, López Obrador llegó al poder en diciembre de 2018, con casi un 80% de aprobación y lo termina con un 66%.
Moody’s destacó que México probablemente elegirá a la primera mujer presidenta en las más grandes elecciones de la historia del país, con más de 20,700 cargos públicos en juego.
“Si bien Sheinbaum lidera muchas encuestas —a veces por un margen considerable—, las elecciones podrían ser reñidas, sobre todo si las encuestas subestiman el apoyo a Gálvez”, añadió el reporte.
Moody’s espera que Pemex continúe ejerciendo un estrés financiero sobre el próximo gobierno, provocando un posible cambio en la política de su deuda, aunque, prevé que continúe el apoyo financiero a la petrolera.
La calificadora destaca que ambas candidatas coinciden en la importancia de la transición hacia la energía renovable, sin embargó, advirtió que probablemente Claudia Sheinbaum, abanderada de Morena, PT y PVEM, mantendrá el negocio de la refinación de Pemex, con un riesgo de generar más perdidas si la estrategia no cambia.
Recordó que Xóchitl Gálvez, representante del PRI, PAN y PRD, propone permitir la participación del sector privado para alejar a la petrolera estatal de las operaciones que no sean favorables para las tecnologías energéticas modernas y sostenibles.
La agencia alertó que tras años de falta de inversión, México está rezagado en sus planes y compromisos de transición energética a medida que busca más oportunidades de nearshoring, por lo que la próxima administración deberá establecer una estrategia de transición con el fin de proporcionar suficiente capacidad y transmisión a los residentes y clientes industriales.
Indicó que la capacidad instalada de transmisión de energía es insuficiente para satisfacer la creciente demanda.
Señaló que las propuestas de Sheinbaum sugieren una continuidad del dominio de CFE sobre el sector eléctrico, pero no hay planes específicos para expandir el suministro energético en el país, y por el contrario, Gálvez reabriría el sector y reactivaría las subastas eléctricas a largo plazo.
Por otra parte, Moody’s identificó que las principales preocupaciones de los mexicanos de cara a los comicios del 2 de junio próximo son la delincuencia, la seguridad, la estabilidad económica y la creación de empleo, además de la corrupción y la necesidad de una mayor transparencia.
En tanto, mencionó que la educación y la salud “siguen siendo críticas, especialmente desde la pandemia (de Covid), que tuvo efectos duraderos en ambas”, mientras que la permanencia de los programas sociales de transferencia de efectivo se ha convertido en un tema importante para ambas campañas políticas.
Moody’s recordó que la candidata que resulte electa el próximo 2 de junio mantendrá el respeto a la independencia del Banco de México.
Advirtió también que deberá prepararse para la revisión del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), ya que detalló “es crucial” para el crecimiento del país.
“La creciente inversión de China en México, como medio para exportar a Estados Unidos en virtud del TMEC, probablemente se convertirá en un punto importante de discusión”, se lee en el documento.
La firma también señaló que el Congreso podría impulsar cambios constitucionales desde septiembre, aún con López Obrador al frente del gobierno, si la alianza oficialista alcanza la representación de dos tercios del Congreso tras su renovación en las próximas elecciones de junio.
“Si bien la nueva presidenta asumirá el cargo el 1 de octubre de 2024, las sesiones del nuevo Congreso comenzarán un mes antes, el 1 de septiembre”, explicó.
