Ciudad de México.- En la subasta de vehículos oficiales que se realizará este fin de semana en Santa Lucía, Estado de México, se ofrecerán 218 unidades y hasta ahora se han registrado 548 personas como potenciales compradores, informó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En conferencia de prensa en Palacio Nacional, dio a conocer que hay un nuevo lote de 66 vehículos de lujo relacionados con actos ilícitos, los cuales fueron hallados en una bodega y decomisados por la Secretaría de Hacienda, y serán subastados en breve.
En este marco, el mandatario federal señaló también que si los gobernadores quieren adquirir las aeronaves que se subastarán en abril próximo, para los servicios públicos de su estado, podrán hacerlo.
Precisó que los interesados en participar en esta subasta tienen como plazo hasta la noche de este viernes para comprar, a un costo de 100 pesos, las bases en las tiendas de conveniencia Oxxo o 7 Eleven.
Posteriormente, «les vamos a estar informando en qué se va a aplicar lo que se obtenga. Ayúdenos a hacer la difusión para que estén buenas las ventas y recaudemos», pidió López Obrador a los representantes de los medios de comunicación.
Recordó que en abril se venderán 54 aviones y helicópteros, entre los que se incluirán aeronaves que actualmente están a disposición de los gobernadores; “no se trata de quitárselos pero si, quieren quedarse con esos aviones, incluso quieren comprar lo pueden hacer para los servicios públicos en los estados”.
Adelantó que tras esta venta, se organizará la subasta de residencias, ranchos y alhajas, ya que se requieren recursos para los programas de bienestar y para la Guardia Nacional, por lo que se informará en qué se aplicará el dinero que se obtenga.
En otro tema, el presidente López Obrador comentó que se apoyará a la industria nacional, el mercado interno y a la industria textil y de calzado, así como a aquellas que se dedican a la producción del acero.
“No estamos de acuerdo con lo que se hizo en el periodo neoliberal, que se llevó a cabo una apertura indiscriminada y sin límites y se dejó en estado de indefensión a los productores nacionales”, expresó.
Por ello, aseguró, se revisará este maltrato para la industria textil y del calzado en el periodo neoliberal, cuando hubo una competencia desleal que significó pérdidas de empleo, cierres de plantas, de talleres y afectó mucho en el Bajío.