Nueva York.- El rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos tocaba máximos de dos semanas el jueves, después de que el presidente de la Reserva Federal de St. Louis, James Bullard, pidió empezar a reducir pronto la compra de activos, antes de que el jefe de la entidad, Jerome Powell, hable el viernes.
La Fed se está «unificando» en torno a un plan para comenzar a reducir sus estímulos, dijo Bullard, agregando que «no necesitamos las compras de activos en este momento». También se mostró escéptico sobre una eventual moderación de la inflación el próximo año.
Las minutas de la reunión de julio de la Fed, hechas públicas la semana pasada, mostraron que la mayoría del comité que fija la política del banco central estadounidense espera que la reducción del programa de compra de bonos empiece más adelante en el año, aunque la confianza del consumidor y otros datos económicos se han debilitado desde el encuentro de julio.
El rendimiento de los bonos referenciales a 10 años operaban al 1,356%, tras tocar 1,375% después de los comentarios de Bullard, su máximo desde el 12 de agosto. Si superan este hito, al 1,379%, será su nivel más elevado desde el 14 de julio.
Las operaciones eran volátiles y la liquidez escasa, ya que muchos inversores están disfrutando de sus vacaciones del verano boreal.
Datos publicados el jueves mostraron que la economía de Estados Unidos creció algo más rápido de lo que se pensaba inicialmente en el segundo trimestre, elevando el nivel del Producto Interno Bruto por encima de su pico prepandémico, ya que el estímulo fiscal masivo y las vacunas contra COVID-19 impulsaron el gasto.
Asimismo, un reporte del Departamento de Trabajo mostró que los pedidos iniciales de beneficios estatales por desempleo aumentaron en 4.000, a una cifra desestacionalizada de 353.000 en la semana que terminó el 21 de agosto.
El Tesoro venderá 62.000 millones de dólares en notas a siete años el jueves, el tramo final de una oferta por 183.000 millones de dólares a corto y medio plazo esta semana.