Nueva York.- Los precios de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, un activo considerado como refugio seguro, subían el viernes, repuntando ante la perspectiva de que la Reserva Federal podría subir las tasas de nuevo este año, ante la preocupación de que el llamado de Israel a los civiles para que abandonen el norte de la Franja de Gaza intensifique el conflicto.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro, que se mueven de forma inversa a los precios, subieron el jueves tras conocerse que los precios al consumidor en Estados Unidos aumentaron en septiembre más de lo esperado, lo que sugiere que la Reserva Federal podría tener que elevar más las tasas para controlar la elevada inflación.
El rendimiento de la nota del Tesoro a 10 años llegó a caer unos 10 puntos básicos y los futuros de los fondos federales redujeron las perspectivas de recortes de tasas para finales de 2024 en aproximadamente la misma magnitud, ya que el mercado sopesaba los fundamentos económicos frente al riesgo de un conflicto más amplio en Oriente Medio.
«Las tasas están entre la espada y la pared. Están atrapadas entre los fundamentos internos, que las empujan al alza, y el riesgo de una escalada en el conflicto de Oriente Medio, que las empuja a la baja», dijo Gennadiy Goldberg, jefe de estrategia de tipos estadounidenses de TD Securities en Nueva York.
El rendimiento del bono referencial del Tesoro podría volver a subir hasta el 5% a corto plazo, o podría bajar por las tensiones geopolíticas, agregó.
El llamado israelí a la evacuación de la mitad norte de la Franja de Gaza ha provocado la cautela de los inversores de cara al fin de semana, dijo Tom di Galoma, director gerente y codirector de negociación de tasas globales de BTIG en Nueva York.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años bajaba 8,8 puntos básicos, a 4,623%, mientras que el de los bonos a dos años, que suelen reflejar las expectativas de tasas de interés, caía 1,9 puntos básicos, a 5,052%.
Durante la esta semana, los bonos a dos años cayeron por debajo del 5% por primera vez desde el 15 de septiembre, mientras los funcionarios de la Reserva Federal insistían en que las tasas seguirían subiendo durante más tiempo.
La diferencia entre los rendimientos de los bonos del Tesoro a dos y diez años, considerada un presagio de recesión cuando se invierte, es decir, cuando los retornos de la deuda a más corto plazo son más altos que los de los títulos a más largo plazo, se situaba en -43,7 puntos básicos.
El rendimiento del bono del Tesoro a 30 años caía 10,4 puntos básicos, a 4,767%.