Tendencia desde Presidencia
Ana Celia Montes Vázquez
De nuevo lo hizo. El presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), emitió un informe y un mensaje por el tercer aniversario del 1 de Julio, cuando en 2018 ganó la Presidencia en su tercer intento y con apabullante mayoría en las urnas. Y no sólo eso, sino que precisamente un día antes también presentó una nueva sección dedicada a exponer y desmentir las noticias falsas o mejor conocidas como fake news que circulan sobre su política y administración.
“¿Quién es quién en las mentiras de la semana?” es como se denomina a este espacio dentro de la Mañanera, su conferencia de prensa diaria, la cual estará a cargo de una diputada morenista. Como era de esperarse, de inmediato surgieron las suspicacias, burlas y hasta desmentidos como el de la revista Forbes. Lo cierto es que aparte de la anécdota, resulta insólito e innovador que sea la propia presidencia de un país, en esta caso México lindo y querido, la instancia que también tenga una sección de este tipo y que, como de costumbre, sea López Obrador, el presidente en funciones, quien con esto marque tendencia informativa como siempre lo hace.
¡¡¡¿¿¿Cómo es esto posible, si el gobierno está para ser fiscalizado y desmentido, o como afirmó cierto protagónico periodista, cuestionado???!!! Dirán y piensan varios, entre los cuales seguramente están empresas periodísticas encargadas de verificar datos y dichos oficiales, pues cabe recordar que en varios medios informativos sean electrónicos o impresos tienen en su labor noticiosa presentar fake news y desmentirlas a partir de un proceso de verificación el cual consiste en revisar en internet o acudir directamente a los protagonistas y autores, por ejemplo.
Y por ésta y muchas cosas más varios individuos consideran y pregonan que la Mañanera es un reality show para lucimiento del presidente López Obrador, como si fuera un conductor o comentarista de un programa; y por supuesto no es así. En primer lugar, esta Mañanera es sencillamente una conferencia de prensa de la Presidencia de la República como cualquiera de cualquier instancia del sector público o iniciativa privada; diaria y llevada a cabo temprano se caracteriza por ser televisada en los canales 11, 14 y 22 de televisión abierta, esos mismos que son medios públicos muy aparte de que a AMLO le guste madrugar y que los demás también, situación extendida a las conferencias vespertinas diarias (y aquí sí incluidos fines de semana) del doctor Hugo López-Gatell por la contingencia sanitaria por COVID-19, constituyéndose en el vocero oficial del Estado Mexicano en este sentido.
Cabe recordar que ésta ha sido la postura de López Obrador desde antes de ganar y asumir la Presidencia comenzando por la presentación de su gabinete, todo lo cual ha marcado tendencia informativa, le guste a quien le guste o no le guste a quien le disguste. Y sin duda, como titular del Ejecutivo ha fijado sus fechas conmemorativas aparte de las oficiales (como el 1 de septiembre cuando se entrega en Informe de Gobierno anual, por ejemplo), siendo el caso del 1 de Julio como un día memorable porque hace tres años, por fin, ganó estableciéndolo como el triunfo de la democracia ciudadana y de la Cuarta Transformación incluyendo informe y mensaje.
Y está bien que lo haga, pues además de dar nota para quienes cubren la fuente, también como Jefe del ejecutivo tiene el derecho y la obligación de usar los medios de comunicación colectiva para exponer la versión oficial, aunque para muchos se esté agandallando el tiempo al aire en lugar de gastar en publicidad para medios privados.
Y también marca tendencia porque además de atender a los chicos de la prensa presenta a miembros del gabinete para responder e informar sobre sus dependencias, recibir a descontentos y pedigüeños colados y hasta la presencia del gato bautizado como Mañanero, porque el presidente López Obrador y la persona Andrés Manuel se exponen públicamente hasta en cuestiones de seguridad. Sólo falta ver cómo será la verificación de fake news por parte de la Presidencia y seguir al pendiente de lo que se diga o salga en la Mañanera porque es un asunto de interés público.