Tentando a la suerte

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Claudia E. Anaya (*)

La situación del turismo nacional es, respecto a los recursos que se le están inyectando durante este gobierno, cuanto menos extraña. Se le reconoce su lugar como productor de empleos, como generador de divisas y se busca fortalecerlo para fomentar la inclusión social, pero casi siempre la nota es que por austeridad se reducirán o se retirarán los recursos destinados a alguna de sus áreas.

La semana pasada no sólo no fue la excepción, sino que mostró que la situación no se reduce únicamente al discurso sostenido por la Secretaría de Turismo (Sectur) sino que es la percepción de toda la administración respecto a este rubro de la economía nacional.

En el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2020, presentado por el gobierno federal en días recientes, se propuso que tanto la dependencia encargada del turismo como la de economía, la Sedatu, la STPS y la Oficina de Presidencia sean quienes enarbolen la austeridad propuesta por la 4T.

En el caso de la secretaría al mando de Miguel Torruco Marqués, cuyo presupuesto se está destinando mayoritariamente al desarrollo del Tren Maya, los recursos que se contempla maneje para el siguiente año ascienden a los 5 mil 34 millones de pesos, lo cual representa un recorte de más del 40 por ciento respecto a 2019.

Obviando la parte que se seguiría destinando a la infraestructura ferrocarrilera del sureste, los recursos con los que contaría la Sectur se destinarían a programas como Disfruta México, Operación Toca Puertas o Reencuentro con mis raíces.

En el caso del resto de las entidades se plantean recortes de magnitudes semejantes, con recortes que rondan el 44 por ciento para Presidencia y el 42 por ciento para la Sedatu.

Sin embargo, un rubro que salió beneficiado dentro de la propuesta de paquete económico fue el sector energético, ya que la dependencia correspondiente duplicaría su actual presupuesto de 27 mil millones hasta casi 49 mil millones en 2020.

Posteriormente, la Sectur dio a conocer nuevos detalles respecto a la carrera Nascar Peak que se habrá de llevar a cabo en la Ciudad de México a finales de noviembre.

De acuerdo con Miguel Torruco, el evento automovilístico dejará una derrama de 54 millones 512 mil pesos durante sus tres días de duración, con una asistencia al Autódromo Hermanos Rodríguez estimada en los 49 mil espectadores.

Aunado a esto, se espera que la presencia en la capital de Nascar genere consigo la reservación de 114 mil habitaciones, elevando la ocupación hotelera en un 74,8 por ciento.

Como referente se tiene la competencia más reciente efectuada a inicios de septiembre en San Luis Potosí, que tuvo la asistencia de 15 mil 789 personas con una derrama económica aproximada de 11.4 millones de pesos, 8 mil 442 cuartos contratados y una ocupación hotelera del 51.7 por ciento.

Además, de acuerdo con el titular de la Sectur, los resultados acumulados de las competencias realizadas en este estado, en Aguascalientes, Puebla, Chihuahua y Querétaro sumaron 106 mil 713 espectadores con una derrama de 68.4 millones de pesos.

Otros detalles de la edición de la Nascar Peak a realizar en la capital del país es que se espera que los impactos en redes sociales lleguen a los 120 millones y que se transmitirá en 17 países de América Latina a través del canal Fox Sports 3.

Sumadas a las carreras pasadas y a la que se realizará en la CDMX, en el calendario de la marca se contemplan el 28 y 29 de septiembre en Guadalajara, el 19 y 20 de octubre en Puebla y el 9 y 10 de noviembre en Aguascalientes.

Torruco Marqués indicó que estos eventos impactan en la promoción turística deportiva y generan una buena derrama económica, y aprovechó el espacio para informar que 26.2 millones de turistas internacionales visitaron México entre enero a junio, lo que significa un crecimiento del 8.0 por ciento.

En materia de divisas se obtuvieron 13 mil 909 millones de dólares (incremento del 13.7 por ciento) y un gasto promedio de 916,8 dólares (incremento del 11.9 por ciento).

“Quiere decir que sigue su rumbo la actividad turística bajo un nuevo modelo que estamos poniendo en marcha y encomendado por el presidente de la República, y son buenas notas y resultados”, aseveró el funcionario.

Si bien es cierto que el turismo no ha visto descensos graves en cuanto a la afluencia de visitantes y varias alianzas importantes se han dado sin poner un solo peso, también se debe reconocer que el sector requiere un nivel mínimo de recursos para operar y esto no se está respetando. Se logran ingresos de millones contra recortes de miles de millones, lo que puede representar una bomba de tiempo si se maneja mal. Hasta el momento la estrategia les ha funcionado, pero tampoco es sabio tentar a la suerte.

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(*) Directora Adjunta de la Revista Hábitat Mx