Ciudad de México.- La diputada Kathia María Bolio Pinelo (PAN) urgió a actualizar la política ambiental del país, especialmente en el tema del manejo y venta de pilas secas utilizadas en celulares, tabletas, laptops y relojes, pues no existe una legislación para su adecuado desecho.
Al participar en el Primer Foro Sobre la Contaminación Causada por los Metales Tóxicos en México, la legisladora indicó que este espacio de discusión del tema ayudará al reaprovechamiento de este tipo baterías, y a cómo afrontar sus riesgos y su impacto contaminante.
Lamentó que por falta de una legislación, la responsabilidad del reciclaje de pilas se delegue al consumidor, que en la mayoría de los casos desconoce su adecuado manejo.
Bolio Pinelo sostuvo que los padres de familia deben ser más conscientes del planeta que heredarán a sus descendientes, así como de la cultura de cuidado y educación.
Comentó que presentó una iniciativa para regular el control, uso y desecho de las pilas secas, a fin de aminorar el riesgo que representan para nuestro país.
Raúl López Becerril, director general de la Sociedad para la Filantropía y el Ambientalismo (Sofia), dijo que convivimos todos los días con metales, la mayoría en dispositivos electrónicos, que al ser desechados pueden contaminar el suelo.
Aseguró que en México no se han hecho las reformas necesarias, no existe un manejo especial ni cuidado para su desecho; ni se ha disminuido o prohibido la importación de la mayoría de estos aparatos.
“El problema más grave es que son bioacumulables, por lo que una vez que se arrojan al suelo, después de un proceso, terminarán en nuestro organismo; la mayoría de estos metales son cancerígenos”, sostuvo.
Cristina Cortinas de Nava, integrante del Comité Consultivo Nacional de Sustancias Químicas sujetas a Convenios Internacionales, de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), destacó que al año mueren 5 millones de personas por exposición a sustancias químicas potencialmente tóxicas, causadas por la contaminación atmosférica derivada de emisiones industriales, de vehículos y descargas de aguas contaminadas.
En relación a los daños causados por metales tóxicos, resaltó que las enfermedades por intoxicación de plomo es 20 veces mayor que la del asma, aun cuando esta última es considerada uno de los padecimientos más graves por exposición a contaminantes del aire, y es 120 veces mayor que la del cáncer. Tan sólo en Estados Unidos, la exposición al plomo genera costos por arriba de los 43 mil millones de dólares.
Estimó que en México, de acuerdo a datos de 2015, las medias geométricas de plomo en la sangre para las poblaciones urbanas y rurales fue de 8.85 y 22.24 microgramos por decilitro de sangre; se dedujo que este metal es responsable de una reducción promedio de 5 puntos en el coeficiente intelectual del 15 por ciento de la población.
Cortinas de Nava dijo que los niños son los más afectados por el plomo, debido a que por cada microgramo de este metal en la sangre, se reduce 0.25 por ciento su coeficiente intelectual. Por ello, agregó, “México requiere fortalecer su sistema jurídico para prevenir y mitigar los riesgos de sustancias tóxicas en general, ya que estamos expuestos a una gama amplia”.
En su turno, el académico y consultor ambiental de la Universidad Iberoamericana, Ciudad de México, Roberto Muñoz Cruz, señaló que el Estado tiene la responsabilidad de garantizar y vigilar que se lleve a cabo una justicia ambiental, de acuerdo con nuestra Constitución Política.
Subrayó que toda persona tiene derecho a exigir y ejercer un ambiente sano y recurrir a las instancias correspondientes para que lo hagan cumplir; incluso, hay organismos autónomos e internacionales que se encargan de observar esa garantía”.
Durante el foro se abordaron las mesas de Medio Ambiente y Derechos Humanos; el Problema del Conocimiento y la Información de las Cuestiones Ambientales; Los Metales Tóxicos y su Impacto en el Medio Ambiente; El Riesgo que Representa el Cadmio y el Mercurio, y la Problemática de las Pilas Secas en México, entre otras.