Entresemana

RSP, Nayarit y los apuros de Morena

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¿Medio corruptos y opacos?

Moisés Sánchez Limón

La corrupción es como los embarazos: no se puede estar medio embarazada ni ser medio corrupto.

A menos que se quiera incurrir en la cínica lógica de ser poquito corrupto, como se asumió en su momento el ex alcalde Hilario “Layín” Ramírez Villanueva, quien declaró que al municipio de San Blas, Nayarit, “sí le robé, sí le robé pero poquito porque está (el municipio) bien pobre”.

En ese tenor vale preguntar qué ganamos los mexicanos si renuncia el auditor Superior de la Federación, David Colmenares Páramo. ¿Un gobierno transparente y honesto porque medio mintió en los informes individuales y el informe General Ejecutivo de la Cuenta Pública de 2019?

Lograr que el gasto público sea transparente y se aplique como lo mandata la Cámara de Diputados en la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación, acorde con la Ley de Ingresos, es un sueño decimonónico: en la Constitución de 1812 se aprobó la Contaduría Mayor de Cuentas, luego convertida, en la Constitución de 1824, en Contaduría Mayor de Hacienda, que se mantuvo hasta 1999 cuando se crea la Auditoría Superior de la Federación.

Se pretendió concretar a la ASF como órgano técnico dependiente de la Cámara de Diputados, que acompañaría al gobierno de la sedicente transición, el de Vicente Fox Quesada, que le cambiaría hasta el modo de andar al ejercicio de los dineros públicos.

Pero. En esos tiempos el escándalo del Fobaproa fue factor político que, incluso, utilizó el entonces dirigente nacional del PRD, Andrés Manuel López Obrador, para llevar agua a su molino. Hasta un libro había escrito y publicitado en 1999. ¿Le suena familiar? Bueno, Ernesto Zedillo Ponce de León le puso el cascabel al gato y convirtió una deuda privada en deuda pública.

¿Transparentes y honestos?

Cada auditor Superior de la Federación ha sido centro de sospechas respecto de la independencia de su trabajo. Gregorio Guerrero Pozas, último titular de la Contaduría Mayor de Hacienda y primer auditor Superior de la Federación del 30 de diciembre del año 2000 y hasta el 31 de diciembre de 2001, insistió en reelegirse en el cargo e incluso interpuso un amparo. ¿Por qué el interés de mantenerse en el cargo? Dirán que don Goyo le tomó cariño a la oficina.

Luego Arturo González de Aragón, auditor Superior de la Federación del 1 de enero de 2002 hasta el 31 de diciembre de 2009, fue centro de discusión por haber trabajado para Carlos Salinas de Gortari, luego enfrentó el escándalo de los 45 mil millones de pesos que fueron perdonados a banqueros que, según dijo, devolvieron esos dineros, aunque nunca mostró el cheque o pagaré que amparara ese monto supuestamente ingresado a la Tesorería de la Federación.

Vino Juan Manuel Portal Martínez, auditor del 1 de enero de 2010 al 31 de diciembre de 2017, con quien casualmente aumentaron las auditorías pero disminuyeron las sanciones. Portal, de plano dejó el cargo en la fecha prevista y, con carácter de auditor interino, Juan Javier Pérez Saavedra atendió la oficina del 1 de enero al 15 de marzo de 2018, fecha en la que David Colmenares Páramo, hoy considerado auditor incómodo, asumió el cargo del que lo quieren defenestrar dizque porque pretendió meter en un conflicto al licenciado López Obrador.

Lo cierto es que se diluye el escándalo que indignó al licenciado López Obrador, porque el costo de cancelar la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional en terrenos del ex vaso de Texcoco no fue de más de 300 mil millones de pesos, sino apenas un poco más de 100 mil millones de pesos. ¿Medio corruptos? Se perdieron miles de millones de pesos, pero poquitos.

¿Es casual este affaire salpicado de suspicacias y cínicas explicaciones no pedidas?

El simplismo de la ecuación política de la 4T implicaría que la administración del licenciado Andrés Manuel López Obrador fue víctima de perversa politiquería electorera que pretendió manchar su albo plumaje de prístina honestidad. No, este tongo entraña la tarea de desprestigiar a uno de los organismos independientes que son contrapeso del poder máximo: el del Presidente de la República.

El escándalo que se cocinó entre el sábado 20 y el lunes 22 de febrero pasado, indudablemente forma parte de la estrategia propagandista de la que Andrés Manuel es principal operador. Él sabe cómo hacerlo, Ernesto Zedillo Ponce de León dixit.

En efecto, Vicente Fox tuvo un severo desencuentro con el auditor Arturo González de Aragón, cuando en mayo de 2005 la ASF descubrió perjuicio al erario por 45 mil 324.6 millones de pesos, ocurrido en 2003 en el rescate de Banamex, Banorte, Bital, Bancomer y Banca Promex.

Pero, mire usted, tómelo como premonición de lo que hoy ocurre con la burda embestida contra ASF y el INAI amén del INE y otros entes autónomos, porque González de Aragón publicó el 8 de febrero de 2016 el artículo “Órganos Autónomos: malas prácticas” –la hemeroteca lo cita–.

Y pareciera, solo pareciera, que el licenciado López Obrador se fusiló el planteamiento básico del artículo de González Aragón, que aludió específicamente a los vicios que arrastran instituciones como el Banco de México –¿por eso la Ley Banxico?—, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, a la que se pretende cambiarle hasta la denominación; el INEGI, el INAI, el IFETEL y hasta el INE, por citar a los que el inquilino de Palacio ha acusado como organismos cuyos funcionarios son machuchones que tienen carrazos y salarios escandalosos.

Y cómo, ¡caray!, no han entendido que no puede haber gobierno rico y pueblo pobre. Bueno, bueno, él tiene que viajar en avión, aunque se exponga a las mentadas de madre. Pero esa es peccata minuta, porque ya le perdió el miedo a volar.

Y sí, ¡vaya coincidencia! El objetivo de descalificar a los organismos independientes camina y el licenciado López Obrador insiste recurrentemente en restarles credibilidad. ¿Alguien apostará por la honestidad en las auditorías de la ASF? ¿Manga ancha en el gasto público porque el auditor es un mentiroso?

A la prensa la estigmatizó. ¿Y todos creen que cada reportero que ejerce el oficio del periodismo en México se apellida Aguilar Camín o Krauze, o…? Escritores de respetable opinión y trayectoria, pero no representativos del gremio periodístico. Pero el prócer generalizó. Hoy toca a los auditores. ¿Quién, quiénes siguen? A Morena le importa un pito el INE y se pitorrea del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

¡Ah!, ¿hay irregularidades en el gasto público en las secretarías de Agricultura y la Función Pública y de Bienestar y en la Conade y en Energía y en el Instituto para devolver al pueblo lo robado? ¡Miente la ASF! Bueno, poquitas irregularidades, han robado pero poquito. ¿Medio corruptos? Digo.

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