Londres.- La primera ministra británica, Theresa May, advirtió hoy “si no aprobamos el acuerdo esta noche, el Brexit puede perderse”, en una última y severa advertencia a los diputados horas antes de la votación del acuerdo sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE).
Al abrir el debate antes de la votación en la Cámara de los Comunes, May con la voz quebrada y visiblemente agotada pidió a los parlamentarios británicos “pragmatismo” para que apoyen su plan para el Brexit tras las garantías ofrecidas la víspera por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.
May, quien necesita que al menos 318 diputados voten este martes a favor del acuerdo del Brexit para que Reino Unido se retire de la UE con un pacto el próximo 29 de marzo, recordó las palabras de Juncker, quien anoche en Estrasburgo aseguró que “no habrá otra oportunidad”.
“La política responsable conlleva pragmatismo. Se trata de equilibrar riesgos y recompensas», dijo May en una comparecencia ante la Cámara de los Comunes, en la que ha emplazado a los diputados a preguntarse si quieren «convertirse en el perfecto enemigo de lo bueno» en la votación de este martes a las 19:00 horas GMT.
Llamó a los diputados a pensar en el mensaje que Reino Unido va a transmitir a todo el mundo y reivindicó la condición de su país como «faro del pragmatismo y la decencia».
La jefa de gobierno británico advirtió que un rechazo a su acuerdo sería también interpretado como una quiebra de la «decisión democrática» tomada en el referéndum de la UE.
A su juicio, un aplazamiento del Brexit «sin un plan» pondría en riesgo las inversiones y los empleos y «no cambiaría el debate». Simplemente le pasaría el control a la UE.
Sobre lo que sucedería si su plan es rechazado este martes, May explicó que los diputados tendrán que votar entonces sobre el escenario de un Brexit sin acuerdo o sobre el aplazamiento de la entrada en vigor del proceso.
La Cámara de los Comunes vota a partir de las 19:00 GMT el texto de retirada «mejorado», según May, después de unas negociaciones entre Londres y Bruselas que terminaron con la firma de tres textos adicionales vinculantes, que buscan disipar las dudas de muchos diputados sobre la controvertida cláusula irlandesa.
Para que el acuerdo pueda superar el trámite parlamentario, la primera ministra británica necesita el apoyo de la mitad más uno de los 634 diputados que votarán al término de un debate sobre el Brexit, es decir al menos 318 votos.
El acuerdo original de retirada fue rechazado en la Cámara de los Comunes el pasado 15 de enero por 432 votos en contra y 202 a favor, por lo que esta vez May necesita, siempre que aún cuente con el respaldo de los parlamentarios que la apoyaron en enero- otros 116 votos para llegar a la cifra clave de 318.
Para ganar esos 116 apoyos, May necesitaría el respaldo de los 10 diputados del Partido Democrático Unionista (DUP) de Irlanda del Norte, otros 70 conservadores (que en enero no la apoyaron) y 36 del Partido Laborista, primera formación de la oposición británica.
Minutos antes de la intervención de May, los 10 diputados del DUP anunciaron su intención de no respaldar el acuerdo de la primera ministra por no garantizar los «suficientes progresos» en la cuestión de la «salvaguarda» irlandesa.
La decisión que tomen los diputados determinará el camino que seguirá el proceso de salida de Reino Unido de la UE, cuya fecha está fijada para este 29 de marzo, casi tres años después de que los británicos votaron a favor del Brexit en un referéndum.