La reforma educativa que viene
Leopoldo Reyes Equiguas *
Y la amenaza se cumplió… Tal y como lo prometió el Presidente Andrés López Obrador cuando estaba en campaña, en relación a la propuesta de revertir la reforma educativa peñanietista, el pasado jueves 19 de septiembre el pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general el paquete de reformas en materia educativa, leyes reglamentarias del Artículo Tercero Constitucional, en el cual se consagra el derecho de los mexicanos de tener acceso a una educación de excelencia.
Las reformas están compuestas por dictámenes por los que se expide la Ley General de Educación y se abroga la Ley General de Infraestructura Física Educativa; la Ley General del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros y la Ley Reglamentaria del Artículo Tercero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en materia de Mejora Continua de la Educación.
Tanto la oposición como el sector empresarial están preocupados, ya que de las reformas planteadas, se tienen en el centro de la controversia los siguientes puntos:
Las reformas son contrarias al espíritu del Artículo Tercero Constitucional, debido a que se desmantela cualquier sistema de mejora continua, con lo que se pierde la oportunidad de mantener una profesionalización permanente para los integrantes del magisterio.
Se rompe con el principio de equidad al crear un régimen de excepción poco transparente para elegir por encima de cualquier otro profesional de la educación, a los egresados de las escuelas normales y de la Universidad Pedagógica Nacional, para ocupar prácticamente de forma automática las plazas sin que medie una evaluación docente y se otorgue el trabajo al candidato mejor evaluado.
Se pone en riesgo a diversas comunidades estudiantiles, ya que se pretende desaparecer al Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (INIFED), pues el gobierno pretende deslindarse de la obligación de mantener, mejorar, equipar, construir y rehabilitar los centros educativos, sustituyendo al mencionado instituto por los “Comités Escolares”.
Estos estarán conformados por padres de familia, docentes y estudiantes, con lo que se reduce la posibilidad de garantizar que cualquier edificación para uso educativo, cumpla con todas las normas requeridas para salvaguardar la integridad de sus ocupantes, y en un país como México donde los sismos están a la orden del día, es un tema que no se puede soslayar.
Estos son sólo algunos de los temas que provocan que más de uno sospeche, que la “nueva” reforma educativa convierta al sistema educativo nacional en un esquema clientelar al más puro estilo del PRI de los años setenta. Al tiempo…
*Rector de la Universidad Latina (UNILA)