Apatía de universitarios por la cultura política en la CDMX
Leopoldo Reyes Equiguas*
Para explicar un fenómeno social cómo es el comportamiento político de los jóvenes universitarios en la Ciudad de México, resulta complejo pero muy importante ahora que muchos estarán en mayoría de edad o tendrán la oportunidad de votar por primera vez este 1 de julio.
Como ciudadanos la juventud mexicana tendrá una decisión fuerte respecto al panorama agreste de los políticos que son vistos por la sociedad mexicana en general como personas que sólo utilizan el poder político para enriquecerse, influir en un gobierno sin programa, sin propuestas y llevar el miedo y el terror nacional y local como prueba de su incuestionabilidad y de esos personajes vaya que tenemos manojos de ejemplos, sobre todo en fuga en varios países.
Si a esto sumamos que políticos y candidatos a puestos de elección popular que han sido asesinados durante el presente año suman 65 de todos los partidos con registro.
Además las desconfianzas son muchas, ya que en este siglo los mexicanos en general y la opinión pública que son los votantes desconfiamos en la honestidad de un político al buscar un puesto de diputado, senador o presidente, ya por no hablar de candidaturas plurinominales que logran muchos sin que nadie vote por ellos y eso que son “representaciones populares”.
Leí un libro que me pareció muy interesante sobre La Cultura Política de los Universitarios en el Distrito Federal, escrito por Rosalba Fabián Isidro, editado por la SEDESOL del Gobierno Federal junto con el Instituto Mexicano de la Juventud, que fue presentada por la autora en el V Concurso Nacional de Tesis sobre Juventud, con el cual obtuvo su grado de licenciatura en Ciencias de la Comunicación por la UNAM. El texto da cuenta de la poca importancia que los jóvenes tienen por la política y su poco interés por los medios de comunicación que transmiten información de los asuntos públicos y política en general.
En particular la investigación de Rosalba Fabián es una recopilación de entrevistas y comparativos de alumnos de universidades públicas y privadas de la Ciudad de México en particular UNAM, UAM, IPN, Universidad Iberoamericana, Universidad Latina y la Universidad Marista.
El resultado es que los jóvenes muestran que con los actuales cambios tecnológicos la red y la televisión son los medios más utilizados para obtener información, pero pocas veces ven o escuchan noticiarios y menos leen prensa escrita. Es decir, el universitario en general no acostumbra leer sobre todo en los casos de UNAM, UNILA, UAM y UIA a diferencia de la UAM y la UMA, aunque hay pautas genéricas.
Otro aspecto es que los universitarios están más orientados a las acciones del Gobierno Federal y sus niveles de gobierno que al de la CDMX o del Estado de México y locales.
Sobre preguntas del seguimiento informativo que nuestra juventud tiene sobre asuntos políticos y de gobierno hay desinterés sobre todo para buscar diarios, revistas o escuchar radio.
Sobre preguntas al orgullo que pudieran tener hacia el sistema económico, instituciones políticas o valores cívicos o nacionales se encuentra bajos los rangos; aunque en orgullo sobre tradiciones y costumbres del país parece haber un apego de los universitarios en este aspecto y claro la cultura política no está en ningún nivel de aceptación, pero la prueba será el próximo primero de julio.
*Rector de la Universidad Latina (UNILA)
