Washington.- Altos funcionarios de la Administración Trump le quitaron importancia este jueves al impacto de la decisión de un tribunal de comercio de Estados Unidos que bloqueó los aranceles más radicales del presidente Donald Trump, expresando su confianza en que sería revocada en la apelación e insistiendo en que hay otras vías.
Los mercados, que han sufrido altibajos a cada giro de la caótica guerra comercial de Trump, reaccionaron con cauto optimismo la mañana de este jueves, después de que el Tribunal de Comercio Internacional de Estados Unidos dictaminó que Trump se extralimitó en su autoridad al imponer aranceles punitivos.
La Administración Trump pidió inmediatamente a un tribunal de apelaciones que suspenda el fallo y permita que el régimen arancelario siga en vigor. Trump ha puesto los aranceles en el centro de su esfuerzo por extraer concesiones de socios comerciales, incluidos aliados tradicionales como la Unión Europea.
El asesor económico de la Casa Blanca, Kevin Hassett, expresó su confianza en que el fallo sería finalmente revocado en una entrevista con Fox Business el jueves, y agregó que no obstaculizaría la firma de nuevos acuerdos comerciales.
«Si hay pequeños contratiempos aquí o allá debido a decisiones que toman jueces activistas, no debería preocupar en absoluto, y desde luego no va a afectar a las negociaciones», dijo Hassett.
El asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro, un firme defensor de aranceles más altos, dijo a Bloomberg TV que el Gobierno Trump podría recurrir a otras leyes para aplicar impuestos a la importación si la decisión del tribunal sigue en pie.
Trump había invocado la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA, por sus siglas en inglés), una ley destinada a hacer frente a amenazas durante emergencias nacionales, para imponer aranceles a casi todos los socios comerciales de Estados Unidos.
La medida hizo temer una recesión mundial. Trump suspendió temporalmente muchos de los aranceles hasta principios de julio, después de que los mercados se desplomaron tras el anuncio.
El tribunal consideró que la ley de poderes de emergencia no otorga a Trump el poder unilateral de ordenar aranceles tan amplios. Algunos aranceles sectoriales, como los que Trump ha impuesto al acero, el aluminio y los automóviles, se impusieron usando otras facultades y no se ven afectados por la sentencia.
El primer ministro canadiense, Mark Carney, celebró la decisión del tribunal, diciendo que era «coherente con la posición de larga data de Canadá» de que los aranceles de Trump eran ilegales.
Otros socios comerciales de Estados Unidos ofrecieron respuestas cautas. El Gobierno británico dijo que el fallo era un asunto interno de la administración estadounidense y señaló que era «sólo la primera etapa de los procedimientos legales».
Tanto Alemania como la Comisión Europea dijeron que no podían hacer comentarios sobre la decisión.
Varios analistas dijeron que era preliminar concluir que el fallo cierra la puerta por completo a los aranceles arrolladores de Trump, con vías legales distintas de la IEEPA probablemente a su disposición.
«Sospechamos que la administración se apoyará en otras potestades legales para mantener los niveles arancelarios en torno a los actuales», escribió Bernard Yaros, economista principal de Estados Unidos en Oxford Economics, en una nota a clientes el jueves.
