Política Global

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  • Morena Edoméx: sacar las candidaturas 2024 sin conflictos
  • Tepotzotlán avanza en consenso: Sara Souza y Roberto López
  • Evitar imposiciones y encuestas: coincidencia generalizada

Juan Barrera Barrera

Además de las elecciones en nueve entidades del país y las federales que incluyen diputados, senadores y presidente de la República, en 2024 en el estado de México habrá comicios concurrentes para renovar las 125 alcaldías y 45 diputaciones locales. Cabe recordar que el PRI perdió el poder en esta entidad, ante Morena, por primera vez en nueve décadas.

Será la primera prueba electoral que enfrentará la nueva gobernadora, Delfina Gómez Álvarez. El partido de la mandataria tiene el gran reto no sólo de recuperar el territorio perdido en las elecciones del 2021, cuando Morena perdió municipios estratégicos del Valle de México, sino también de ampliar su poder territorial.

Toluca, por ejemplo, con una figura atractiva y competitiva, el partido guinda podría arrebatársela a la coalición PRI-PAN-PRD, cuyo alcalde, Raymundo Martínez Carvajal, ha tenido un desempeño administrativo desastroso y recientemente sus conflictos familiares se le han apilado con las demandas de su ex esposa, Viridiana Rodríguez, por violencia física, emocional y sexual. El munícipe se encuentra prófugo de la justicia.

Candidaturas de unidad para evitar encuesta

Un reto más será sacar adelante las candidaturas lo más tersas posibles y eso dependerá del método o métodos para la selección de los perfiles guindas y evitar a toda costa el desaseo que privó en por lo menos medio centenar de municipios en el 2021, en donde las bases morenitas se inconformaron por la forma en que fueron cedidas los cargos de elección popular, muchos de ellos, acusaron los quejosos, fueron a través de la compra-venta, lo que hizo recordar al viejo régimen priísta.

La rebeldía de las bases guindas se tradujo en el voto de castigo en contra de los candidatos impuestos por los dirigentes morenistas que carecieron de principios, de visión política y no alcanzaron a visualizar las evidentes consecuencias. Los plantones en la explanada del IEEM fueron una suerte de premonición y los liderazgos nunca se quitaron los lentes oscuros.

Morena estatal no ha renovado sus coordinaciones municipales y a la militancia le ha costado mucho trabajo autogobernarse por los conflictos y problemas particulares que enfrenta cada municipio. La gran mayoría sufren el fenómeno del grupismo, que no corrientes de opinión, que son organizaciones que datan de hace tiempo, muchas de ellas enfrentadas, otras a veces coinciden en las coyunturas políticas y llegan a unificarse momentáneamente de acuerdo a sus intereses inmediatos.

Las intentonas de unidad; ¿ahora sí?

La mayoría de las veces estos grupos intentan una suerte de unidad con el objetivo de lograr candidaturas negociadas y consensadas, a veces tienden a entrar en contradicciones por los protagonismos excesivos y toda laya de mezquindades y arrogancias que no pueden sacudirse o no quieren, a la hora de elegir a sus candidatos a cargos de elección popular.

Llama la atención que, en algunos municipios, como es el caso de Tepotzotlán en donde sectores morenistas han realizado esfuerzos de unidad. En el proceso interno de 2021 esa suerte resultó en un total fracaso con las consecuencias previsibles: la imposición por parte de la dirigencia estatal, de la cual salió favorecido el grupo de Pedro Zenteno, actual director del ISSSTE, y que ahora quiere transitar por la misma ruta. Las consecuencias de esta decisión igualmente fueron previsibles: Morena se dividió y perdió la contienda.

En Morena Tepotzotlán se realizó un ejercicio democrático interesante en donde participaron la gran mayoría de aspirantes a la presidencia municipal, 26 hombres y 15 mujeres, muchos de ellos sin posibilidades reales, y al final del proceso llegaron 15 y 10, respectivamente. Se acordó que cada grupo seleccionaría a un precandidato hombre y a una precandidata mujer, previendo la equidad de género.

Sara Souza y Roberto López, visibles precandidatos

Finalmente se eligió a Roberto López Rosas, un empresario exitoso del sector educativo que ya ha incursionado en el ámbito político. En la coyuntura electoral de 2015 fue candidato a alcalde por el efímero Partido Futuro Democrático. Por las mujeres la responsabilidad recayó en Sara Souza Arroyo, inteligente abogada que renunció a su empleo en el Ayuntamiento (la propuesta la formuló a todos los aspirantes que tuvieran cargo público para poder registrarse). En la anterior elección fue candidata de Morena a la sindicatura. Se caracteriza por ser una mujer alejada de frivolidades y estridencias. No pierde la paciencia y equilibrio, dos valores fundamentales en ambientes políticos extremos.

Cada ejercicio democrático suele tener sus riesgos, acaso existe la democracia perfecta. Ningún proceso de esta naturaleza está exento de inconformidades, a veces razonables. Tampoco faltan las inercias que pretenden desconocer esfuerzos con actitudes contrarias a principios que afirman enarbolar, acompañadas de estridentes y falsos discursos.

Las precandidaturas de Souza Arroyo y López Rosas quedan legitimadas internamente con las evidencias de la secuencia de las reuniones y asambleas de donde surgieron, apegadas a la norma partidista, según han informado, mismas que han sido entregadas a las instancias de Morena del estado de México, que ha subrayado que en los municipios donde haya candidaturas consensadas, o de unidad, no se realizará la encuesta. Pero hay otros liderazgos en Tepotzotlán, muy respetables, que han decidido tomar la vía más personal, otros esperan la bendición foránea. Este lunes inició el registro para alcaldes en la entidad mexiquense y seguramente habrá perfiles variopintos que no corresponden a la tradición morenista.

En 2021 la candidatura a la presidencia municipal recayó en el género masculino, por lo tanto, en el 2024 la decisión morenista podría favorecer a la opción femenina. Queda solamente que la Comisión de Elecciones y la actual dirigencia estatal a cargo de Martha Guerrero tomen con responsabilidad, madurez y sensatez la agria experiencia del 2021 para que no se vuelva a repetir.